
La escasa actividad turística ha incrementado el número de parados / Blanesaldia.com
Blanes cerró el año 2020 con 3.634 personas inscritas en la oficina de empleo del Servei d’Ocupació Catalunya en busca de un trabajo. Son más de 800 demandantes de empleo con respecto a diciembre de 2019, cuando el Covid-19 empezaba desde China su mortífera galopada por todo el mundo. En Lloret de Mar ha ocurrido lo mismo y empieza 2021 con casi 800 parados más inscritos en la oficina de empleo local.

Desde que estalló la pandemia del coronavirus Covid-19, que comportó el durísimo periodo del confinamiento (del 15 de marzo a finales de mayo) el número de parados ha experimentado un fuerte aumento en toda Cataluña y España. La comarca de la Selva también padece los efectos económicos de la pandemia.
Los arrendatarios de locales comerciales cerrados o con el uso limitado por las medidas contra la Covid-19 podrán renegociar el precio de los alquileres. El Consell Executiu de la Generalitat aprobó ayer un decreto ley que faculta a los titulares de los negocios para iniciar una negociación con los propietarios de los inmuebles para establecer, de mutuo acuerdo, una rebaja del importe de la mensualidad. Esta negociación se deberá cerrar en el plazo máximo de un mes.
El número de parados inscritos enlas oficinas de empleo de la comarca de la Selva volvió a incrementarse el pasado mes de septiembre, esta vez en 400 personas, dejando el total de demandantes de empleo en 14.700 individuos. En Lloret de Mar el incremento registrado ha sido de 238 personas, en Blanes de 217 y en Tossa de Mar de 47.





El Ayuntamiento de Tossa no cobrará la tasa de ocupación de vía pública del año 2020 por la crisis del Covidien-19. Esta medida, que forma parte del Plan de Reactivación Económica del municipio por la crisis del Covid-19, beneficiará principalmente a bares y restaurantes por la ocupación de las terrazas y comercios por la ocupación de las aceras con los expositores.
