Moción del pleno de Blanes a favor de consensuar una nueva ubicación para el Festival Barrakes

Joaquim Torrecillas mostró la documentación que generan los problemas acústicos

El último pleno de la legislatura del Ayuntamiento de Blanes estuvo dedicado casi exclusivamente a la votación de cuatro mociones presentadas por los grupos de la oposición (PSC y EUiA), además de ERC. La primera y más importante fue la presentada para tratar de solucionar el conflicto suscitado por la decisión del equipo de gobierno de trasladar el Festival Sa Costa Barrakes del campo municipal de fútbol a la Ciudad Deportiva.

 

La moción la presentó primero ERC en el registro municipal y a la misma se adhirieron PSC y EUiA, que consensuaron el texto definitivo de la misma. En el documento se realizan varias consideraciones previas, en las que se critica la decisión unilateral del traslado (no se consultó a la asociación que lo organiza) y se argumenta que el lugar escogido generará problemas de movilidad a los jóvenes y que, previsiblemente, sería un fracaso realizarlo en un lugar notablemente alejado del epicentro de la Festa Major, pues los conciertos empiezan después de terminar el espectáculos de los fuegos artificiales en Sa Palomera.

El pleno despertó el interés de jóvenes y adultos

Tras estas consideraciones se solicita que el equipo de gobierno “negocie” con las entidades juveniles una nueva ubicación, que permita realizar el festival en las mejores condiciones. También, que a partir de ahora cuando se traten asuntos que afectan a la juventud, se consulte al Consell Local de la Joventut antes de adoptar decisiones.

En los turnos de palabras los portavoces de los grupos de la oposición reiteraron los argumentos esgrimidos los últimos días. Todos coincidieron en pedir tolerancia a los vecinos del barrio Els Pins, donde se celebra el festival Barrakes y que padecen un problema de conductas incívicas y ruidos buena parte del año. También, que “los jóvenes se merecen un espacio digno para disfrutar de la Festa Major”, como afirmó el edil Joan Salmerón (EUiA-ICV).

Por su parte, Lourdes Fàbrega (PSC) afirmó que el asunto se ha gestionado de forma “nefasta”. Asimismo, que el equipo de gobierno lleva cuatro sin haber buscado un emplazamiento alternativo y que a última hora se había decidido el traslado a la Ciudad Deportiva de forma “improvisada y sin planificación”. Fàbrega remató su diatriba al decir que “convivencia no quiere decir exclusión”.

Las mociones presentadas se debatieron con intensidad

El concejal de Gobernación, Joaquim Torrecillas, dijo que el equipo de gobierno siente el “máximo respeto” por la asociación Sa Costa Barrakes, que apoya el festival y que los organizadores han venido realizando un “buen trabajo para no generar conflictos” con los vecinos de Els Pins.

Diligencias de la Guardia Civil

Pero, a renglón seguido explicó que está obligado a velar por la salud de los vecinos y comentó que recibieron el año pasado una queja de Síndic de Greuges por los problemas de ruido en el barrio. La intervención del Síndic en este asunto se paralizó al haberse presentado en la Fiscalía de Medi Ambient de Girona una denuncia por los problemas de ruido. Esta denuncia dio lugar a la apertura de unas diligencias por parte del SEPRONA de la Guardia Civil, que requirió el pasado 20 de octubre al Ayuntamiento para que aportase información sobre los problemas acústicos en el barrio y, en concreto, los que se originan en las calles Menorca, Ibiza, Camí dels Olivers y Josep Trueta.

Torrecilas subrayó que el Festival Sa Costa Barakes no es “culpable” del problema, pero que “el Ayuntamiento tiene la potestad de cambiar las cosas, pues en caso contrario podríamos incurrir en un delito” contra la salud pública. Para reforzar su argumentación, Torrecillas levantó un grueso paquete de documentación atado con una cuerda y lo colocó sobre la mesa. Esa documentación es la que el Ayuntamiento ha remitido al SEPRONA para justificar que lucha por el problema de ruidos y los actos incívicos que molestan a los vecinos de Els Pins.

Los concejales del PSC Lourdes Fàbrega y Josep Marigó

En una posterior intervención, el alcalde Josep Trias afirmó que no permanecerá “impasible” ante un asunto que podría acabar con un concejal imputado por negligencia. Hace años, la concejala socialista Pepa Celaya se vio en ese trance por problemas similares.

La moción se aprobó por 10 votos a favor y 9 en contra. La apoyaron los ediles del PSC, EUiA-ICV y ERC. En contra votaron los concejales de CiU y PP y Fernando Gómez. Faltaron al pleno Pepa Celaya (PSC) y Anselmo Ramos (PDB).

Buscar un emplazamiento alternativo

El asunto volvió a tratarse una vez finalizado el pleno -al que asistieron unos 30 jóvenes, hecho insólito que elogiaron los partavoces y el alcalde-, en el espacio de tiempo que el equipo de gobierno dedica a responder las preguntas de los asistentes. Varios miembros de la organización del Festival Barrakes expusieron sus argumentos para intentar salvar la celebración de los conciertos en el campo municipal de fútbol. En este sentido, reiteraron que la empresa que lo organiza había comunicado que se compromete por escrito a bajar el volumen de 110 a 100 decibelios, lo cual aminoraría el ruido percibido en el interior de las viviendas.

También, desde el equipo de gobierno se comentó que se trabaja por encontrar un espacio alternativo que satisfaga a las partes, con lo cual implícitamente vino a reconocer que ha descartado la opción de la Ciudad Deportiva, emplazamiento al que se oponen las entidades que promueven el festival. Lo cierto es que, en la línea de la moción aprobada, las partes implicadas mantendrán contactos los próximos días para intentar reubicar el festival y evitar que se tenga que suspender.

La Colla de Diables Sa Forcanera reivindicó celebrar el Correfoc los días de Festa Major

Correfoc en Festa Major

Antes de comenzar el pleno y a pesar de la persistente lluvia, un grupo de jóvenes se concentraron frente al Ayuntamiento e hicieron sonar silbatos y tambores para reivindicar que durante los días de Festa Major se vuelva a celebrar el Correfoc. La protesta la protagonizaron los miembros de la Colla de Diables Sa Forcanera, que llevan cuatro años sin poder celebrarlo en la ciudad. Curiosamente, intervienen en la Festa Major de Lloret de Mar.

El equipo de gobierno suprimió el Correfoc por los problemas seguridad derivados a causa de la gran concentración de público en la franja marítima de la población, donde también se ubican feriantes y puestos de venta de artesanía. Acabado el pleno un miembro del colectivo realizó un alegato en defensa de la recuperación de esta actividad. El concejal de Festejos, Fernando Gómez, se mostró partidario de estudiar si esta actividad se puede volver a realizar.

Texto, fotos y edición: José Fernández