La magistrada titular del juzgado penal 4 de Girona ha condenado a Antonina Vasylenko a una pena de tres años de prisión por un delito de homicidio imprudente, del que fue víctima su hijo de seis años de edad ya que falleció a causa de un incendio en su vivienda cuando estaba solo. Además, la condenada deberá indemnizar al padre del menor con 68.026 euros por daños morales. La sentencia no es firme ya que ha sido recurrida por la defensa de la encausada.

Según los hechos probados en la sentencia, la mujer, que residía en un piso de la Avenida de Blanes, en Lloret de Mar, se reunió la noche del 29 de noviembre de 2008 con un amigo y se trasladó a una discoteca, dejando a su hijo solo en casa y con la llave cerrada. Durante la noche visitó dos veces el piso y comprobó que la criatura dormía. A las 5,30 horas volvió por tercera vez acompañada por el amigo, con el que había estado consumiendo cocaína.

Vieron que el menor seguía durmiendo y se trasladaron a Calella. Aproximadamente una hora más tarde un vecinó del piso percibió olor a quemado. Salió al rellano del inmueble y oyó el grito del niño. Entonces, llamó a los servicios de emergencia. Pocos minutos después llegó una dotación de los Mossos d’Esquadra, que no pudieron abrir la puerta, lo cual sí consiguió una dotación de bomberos que también había sido avisada..

Los bomberos observaron que en la vivienda había una gran cantidad de humo y que el niño estaba inconsciente y tendido sobre una mesita que había en el comedor. Lo sacaron al exterior donde una unidad del SEM le suministró oxígeno y le intentó reanimar, sin conseguirlo ya que falleció por intoxicación de monóxido de carbono.

Mientras se realizaban estas tareas de auxilio, los policías llamaron a la madre a las 7,45 horas para alertarle del suceso, pero la acusada se desentendió del asunto y cortó la llamada. Realizaron nuevas llamadas, pero la mujer no las atendió. Sobre las 13,30 horas se personó en su vivienda y una hora después fue detenida por los Mossos d’Esquadra.

Se da la circunstancia de que antes de que ocurriera el suceso tanto el padre del menor como su hermanastra se ofrecieron a la acusada para hacerse cargo de la víctima y cuidarlo. Sin embargo, la mujer rechazó el ofrecimiento sin motivo alguno.