En el solar de la derecha de la imagen, en el hay coches estacionados, se proyecta constuir el crematorio / Foto: Google Earth

Tal y como informó Blanesaldia.com el pasado sábado, mañana los grupos municipales de EUiA-ICV y PP presentarán durante el pleno del Ayuntamiento de Blanes una moción en la que instan al alcalde, Josep Marigó, y a la junta de gobierno, a revocar el acuerdo del pasado diciembre mediante el cual se modificó el uso de un solar situado cerca del Hospital Comarcal de Blanes, para construir un tanatorio, crematorio y columbario.

La modificación de usos del solar ha generado inquietud entre los vecinos de Valldolig y otras zonas habitadas próximas, pues alegan motivos urbanísticos, psicológicos y medioambientales. Ayer, día en que finalizó el plazo de exposición pública del proyecto del plan parcial, los concejales Joan Salmerón y Francisco Martínez, de EUiA-ICV, añadieron otros motivos para oponerse al proyecto.

Salmerón recordó que el tanatorio ya fue polémico en la legislatura 2003-2007, cuando su grupo gobernó con los socialistas. Entonces, el alcalde Josep Marigó propuso situarlo cerca del barrio de Mas Cremat, pero la propuesta no prosperó. Posteriormente, durante la anterior legislatura, CiU, que gobernaba en coalición con el PP y el desaparecido PDB, aprobó el POUM, en el que se proyecta construir un nuevo cementerio en zona boscosa, en el límite de Blanes con Lloret de Mar. Lo construirían las dos poblaciones y tendría un crematorio.

Criterios urbanísticos

Los concejales Francisco Martínez y Joan Salmerón, ayer en la sede de EUiA / Foto: JFG

Este emplazamiento, según Salmerón, se ajusta a los criterios urbanísticos que se siguen para construir los crematorios: alejados de zonas habitadas y transitadas, en un lugar discreto y, a ser posible dentro de los cementerios. Tanto el de Blanes como el de Lloret de Mar han quedado insertados en la trama urbana de las poblaciones y existe necesidad de construir un nuevo equipamiento que dé servicio a ambos municipios.

El concejal criticó que el proyecto priorice la acuciante necesidad del equipo de gobierno de generar ingresos y que se minusvalore proyectar equipamientos con una visión de futuro de acuerdo con criterios urbanísticos racionales. Además, indicó que los socialistas gobiernan en minoría y que este asunto atañe a toda la ciudad y que la ubicación del crematorio debe gozar de un amplio consenso.

Por su parte, el concejal del PP Salvador Tordera, manifestó que «no es correcto poner un crematorio delante del hospital», pues sería contraproducente para aquellos pacientes en grave estado de salud y sus familiares. Tordera también subrayó que sería un «foco de contaminación».

El alcalde Josep Marigó manifestó a Diari de Girona que ubicar el crematorio a pocos metros del hospital tendrá varias ventajas: estará bien comunicado y en zona no residencial; el solar no costará dinero al Ayuntamiento (será cesión en contrapartida al plan parcial de la carretera de Lloret) y reportará 600.000 euros al Ayuntamiento, que servirán para cometer obras de reparación en el cementerio.

Previsiblemente, la propuesta del equipo de gobierno comportaría crear una empresa mixta dedicada a los servicios funerarios. El partner privado construiría el tanatorio y crematorio a cambio de gestionar durante una serie de años el servicio.

Es evidente que con este plan Blanes tendrá gratis un tanatorio y crematorio. Además, conseguirá dinero. La cuestión está en si el plan desfigura el POUM en lo referente a un equipamiento que despierta susceptibilidades. Y todo ello con una visión que piensa más en las finanzas del Ayuntamiento a corto plazo que en construir el Blanes de las próximas décadas.